Hemos enfrentado en los últimos meses una situación particularmente compleja, a raíz de la declaración de huelga de hambre de un grupo de personas privadas de libertad mapuches, que están protestando y haciendo ver algunos puntos de vista de su parte. En el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos hemos tomado este problema con la mayor seriedad y dedicación posible. Es un tema que nos preocupa y nos compromete. Y es por eso que, durante todo este proceso, hemos estado trabajando junto al Subsecretario de Justicia, quien tiene la responsabilidad de supervisar más directamente las actuaciones de Gendarmería y de todo el sistema penitenciario. Y nuestra Subsecretaria de Derechos Humanos, Lorena Recabarren, porque en esta actuación, nosotros queremos trabajar con enfoque de Derecho, porque entendemos siempre hay cuestiones de esta naturaleza, de Derechos Humanos, involucrados en estas decisiones. Y por eso, como equipo, junto a Sebastián Valenzuela, y Lorena Recabarren, hemos estado trabajando.
Nos inspiran dos principios centrales: uno, que estamos en un Estado de Derecho democrático y debemos actuar en consecuencia, de acuerdo a nuestras atribuciones y competencias, no más allá de lo que nosotros podemos realmente resolver. Y lo otro, estamos conscientes de que se trata de cuidar la salud y vida de personas, puesto que quienes están privados de libertad, están bajo la custodia del Estado, y nosotros tenemos, por lo tanto, la obligación y el deber de asegurar la salud y vida de quienes han estado puestos bajo la responsabilidad de organismos del Estado, como es Gendarmería.
La actitud con que hemos ido enfrentando este proceso, es una actitud de diálogo, de diálogo abierto, transparente, honesto, de buena fe, con nuestros interlocutores. Nosotros de verdad creemos que situaciones complejas y conflictivas solo se van a resolver bien a través del diálogo. Y lo que ha ocurrido en La Araucanía desde hace muchos años, lamentablemente, en muchas circunstancias y en muchos grupos, se saltan el diálogo y entran en niveles de conflicto, de enfrentamiento, que no resuelven los problemas.
Nosotros tenemos la convicción, de que este y cualquier problema de esta naturaleza en La Araucanía se va a resolver bien por la vía del diálogo. Y es lo que hemos hecho.
Hemos desarrollado un proceso que va por dos cuerdas. Por una, en la conversación, en escuchar, en este caso al machi Celestino Córdova, a los comuneros de Angol, a quienes están en huelga de hambre para conocer lo que piensan. Por la otra, hemos abierto diálogos interculturales desde hace ya un mes y medio, escuchando instituciones, representantes de pueblos originarios, académicos, propuestas que nos permitan ver cómo mejoramos el sistema penitenciario a la luz de compromisos internacionales, como el Convenio 169, que se refiere precisamente a la forma de integrar a los pueblos originarios dentro de nuestro sistema institucional.
En lo que dice relación con el proceso que hemos seguido de conversa, de escucha, de diálogo con el machi Celestino Córdova, quiero señalar que además hemos contado con el acompañamiento de instituciones muy importantes: del Instituto Nacional de Derechos Humanos; del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Derechos Humanos con sede en Santiago; y del Colegio Médico, especialmente del departamento de Derechos Humanos de ese Colegio. En conjunto con ellos hemos podido trabajar estos temas, ellos han actuado como intermediarios, representando, escuchando, haciéndonos ver los puntos de vista del machi y de su gente, escuchando los nuestros, y en conjunto, hemos ido desarrollando un proceso, en virtud del cual, logramos construir una propuesta. Una propuesta seria que creemos recoge las principales inquietudes y que permitiría superar este conflicto a la brevedad posible.
El día jueves 13 de agosto recién pasado, le hicimos entrega, a través de medios remotos, a la representante vocera del machi Celestino Córdova, la propuesta final que hemos elaborado. También ese mismo día se le hizo llegar a las instituciones antes mencionadas, que han sido como digo, testigos del proceso que se ha llevado adelante. El día viernes, como una manera de avanzar en la resolución por parte del machi de esta propuesta, personalmente hablamos con él. Y a esa propuesta, le agregamos un complemento en conocimiento de que el machi estaba particularmente interesado de una visita a su rehue, por razones espirituales. Le dijimos muy bien, a esos ocho puntos y a la propuesta central que hemos hecho, le agregamos este otro punto, porque creemos que para usted puede ser importante en su desenvolvimiento espiritual, pero también para tomar una decisión.
Esa ha sido la propuesta que hemos construido con estos caracteres. Esa propuesta el Machi no la respondió inmediatamente, no le parecía satisfactoria, él quería una permanencia en su rehue de meses, pero le hicimos ver que los tribunales de justicia le habían denegado, y no hay ninguna autoridad, ni del Gobierno, ni de los tribunales, que puedan autorizar lo que él solicita. Por lo tanto, la propuesta final es esa: los ocho puntos, más la visita al rehue, en los mismos términos que se hizo hace dos años, es decir, por 14 a 15 horas.
Desde entonces no hemos tenido una respuesta definitiva. Hemos oído a las voceras, a veces decir una cosa, y a veces manifestar una distinta. Yo quiero decir que para nosotros esta es la propuesta final, propuesta que no se ha cambiado, propuesta que no se ha retirado, y no ha habido ninguna retractación, en un proceso
en donde hemos actuado siempre de buena fe y en forma muy transparente con nuestros interlocutores.
Sabemos que esta una situación compleja, y por eso hemos cuidado, especialmente, no solo llegar a propuestas reales, efectivas, que vayan incorporando y dando cuenta de la realidad de las personas privadas de libertad de origen mapuche, en este caso, en el sistema carcelario.
Cómo pueden ellos cumplir sus condenas, con un sistema que les permita desarrollar sus costumbres, su cosmovisión. Respetar lo propio que tiene el pueblo mapuche. Es decir, estamos tratando de que el sistema penitenciario tenga criterios de pertinencia cultural para que las personas, sin transgredir el principio de Igualdad ante la Ley, ni de la No Discriminación, sientan que, en lo propio, cumplen sus condenas dentro de un ambiente que les respeta su manera de ser, sus aspiraciones espirituales. Eso es lo que hemos ido tratando de construir, y creemos haber generado buenos cambios, y sobre todo, el inicio de un proceso que se sigue y que esperamos culmine en la forma más exitosa posible.
Por eso lamentamos expresiones que a veces escuchamos de voceras y de otros, que no se avienen con lo que hemos hecho. Hemos hecho un proceso limpio, claro, preciso, que da cuenta de las inquietudes que ha presentado el Machi, en este caso, más adelante lo haremos con los comuneros que están en huelga en Angol, y esperamos su respuesta. Nosotros hicimos nuestra parte del trabajo les toca a ellos.
Las instituciones que nos han acompañado, a quienes agradezco muy sinceramente, le han dedicado muchas horas de trabajo, y quizás gracias a ellos hemos podido construir una propuesta que es extraordinariamente relevante, es un paso gigantesco de un punto de vista histórico en la forma en cómo se trata a personas privadas de libertad pertenecientes a pueblos originarios, que esperamos sean reconocidas y que el machi finalmente se sume a culminar este proceso con un acuerdo que es satisfactorio para todos, pero particularmente para quienes él representa.
Ministro, ¿continúa entonces la mesa de diálogo con el machi Celestino Córdova y los voceros en huelga de hambre?
Mire, aquí no ha habido realmente una mesa de diálogo, aquí ha habido un diálogo. Hemos estado conversando y hemos tenido, como terceros intermediarios, a estas instituciones que hemos mencionado: el INDH, el Colegio Médico y la oficina de Santiago del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Este es un proceso que se ha ido conversando, recibimos propuestas, formulamos ideas y, finalmente, culmina con una propuesta. Esa propuesta se le da a conocer el día jueves, y el viernes, personalmente, yo converso con el machi, para instarlo a asumir esa propuesta. y le agregamos esta visita al rehue, con lo cual, ya la propuesta adquiere una gran culminación.
Ahora, lo que necesitamos es que el machi se pronuncie. Todo lo otro, son ruidos que no vienen al caso, aquí no ha habido ninguna complicación, ningún Sí, ni un No, aquí ha habido finalmente un proceso, y lo que necesitamos es que el machi nos diga si le parece bien, finalmente, la propuesta que le hemos hecho, es lo que falta.
Ministro, ¿hay espacio para ampliar más la propuesta?
Mire, el espacio es el que ha existido durante semanas, si no meses. Yo creo que nosotros estamos cerca de cumplir dos meses en conversaciones de este tipo, en donde han participado muchas personas, en donde nos hemos preocupado de escuchar, porque cuando uno dialoga, muchas veces le gusta que lo oigan. Bueno, nosotros hemos escuchado, y hemos ido estudiando cómo resolver mejor las cosas, desde el punto de vista de Justicia, desde el punto de vista de Derechos Humanos, desde la proyección internacional. Hemos tenido también a la vista las conversaciones que hemos tenido en el Congreso, en las comisiones de Derechos Humanos, tanto de la Cámara como del Senado, los diálogos interculturales que han ido avanzando.
Aquí hay un proceso que se ha desarrollado, que yo creo va a marcar un antes y un después en la forma cómo se trata a los pueblos originarios en el sistema penitenciario. Esperamos que eso se extienda a la administración de justicia y a muchos otros frentes, porque creemos que esa es la forma cómo el país cumple con sus obligaciones internacionales.
En lo especifico, creemos haber hecho un esfuerzo muy grande, y reitero, gracias a estas instituciones, que incluso cuando hicimos cambios normativos, que ya están en aplicación, a propósito de este proceso de estos últimos dos meses, estas instituciones, como el ACNUDH o como el Colegio Médico, han reconocido y valorado lo que hemos hecho, como un paso que realmente permite dar cuenta del compromiso con que nuestro Ministerio, con que nuestro Gobierno, está asumiendo esta tarea y cómo estamos llevando adelante, por primera vez quizá en mucho tiempo en nuestro país, en forma clara el Convenio 169
Ministro, hay posibilidad de evaluar otro tipo de ofrecimiento a Celestino Córdova en caso que no deponga su huelga de hambre
Los diálogos son procesos complejos y a veces largos. Nosotros hemos ido recorriendo, en conjunto con el Machi y con estas instituciones, escuchando a muchos, y formulando proposiciones, y afinando la sintonía para llegar a una propuesta buena, clara, que da cuenta de las necesidades que se han solicitado.
Y, siempre dentro de nuestro ordenamiento jurídico, dentro de la competencia que a nosotros nos corresponde, en el ámbito de Gendarmería, y sobre esa base, hemos construido esta propuesta.
No creemos que haya espacio ya para seguir indefinidamente en el diálogo. No nos olvidemos que pasan los días y las huelgas de hambre empiezan a causar daños en la salud, y nuestro compromiso es ese, teniendo a la vista esto, es que le pedimos expresamente al Machi que finalmente se sume, que terminemos este proceso por arriba, con la tranquilidad de que todos hemos hecho el esfuerzo por superar estas dificultades.
Ministro, ¿en qué están los recursos presentados el caso de que el Gobierno necesita cautelar la vida del Machi?
Sí, los recursos se presentaron por Gendarmería, y por el Servicio de Salud, para que estos puedan actuar en caso de una situación grave, que se pudiera precipitar. Es lo que se ha hecho habitualmente en las huelgas de esta naturaleza, desde hace muchos años. Siempre estas instituciones presentan esos recursos para poder actuar con la autorización de quienes corresponde.
Ministro, ¿cómo se entienden las declaraciones de ayer de su vocera, Cristina Romo, dónde ella dice que hay acuerdos rotos por parte del Gobierno que se habían establecido?
Bueno, a nosotros nos han sorprendido esas declaraciones porque no corresponden a los hechos, no corresponden a la realidad. Los hechos se han desarrollado tal cual los hemos descrito.
Nosotros hicimos una propuesta el jueves, el viernes la complementamos en una conversación directa para mejorarla, y desde entonces estamos esperando una respuesta. Lo que hacen las voceras, un día dicen que “no hay propuesta”, en otro dicen “que hay propuesta”, y otros días dicen que “se retiran”, mire… no voy a entrar en los detalles, nosotros tenemos clara nuestra actuación y de eso pueden dar cuenta las instituciones a que me he referido. El Colegio Médico, el INDH, ACNUDH, conocen lo que hemos hecho y la forma cómo hemos actuado, por lo tanto, no voy a entrar a polemizar, solamente digo que nuestra versión se apega fielmente a cómo los hechos han ocurrido.
No he logrado yo entender, porque de repente surgen declaraciones, críticas, cuestionamientos que no tienen que ver con la forma en cómo han ocurrido los hechos. Así que estamos muy tranquilos, y siempre, como le digo, pensando en cómo resolvemos los problemas, no cómo los agravamos; cómo evitamos las confrontaciones y las críticas, si no que cómo, a través del diálogo, damos una solución humana que resguarde la salud de las personas y que nos permita seguir avanzando.
Ministro, en el caso de los agricultores, como el caso particular de Roxana Carrut que lleva 19 días en una huelga de hambre porque siente que al final que todos los ataques a su campo, donde ha perdido casi todas sus cosechas, también necesita una respuesta. ¿Están dialogando con ella también?
No, no hemos tomado contacto con ella. Nosotros hemos conversado en materias de huelgas de hambre con personas que están bajo nuestra custodia, léase, el Machi Celestino Córdova en Temuco, o con los comuneros de Ángol, los ocho que están en huelga de hambre desde hace algún tiempo, y que tienen, además, no solamente están bajo la custodia de Gendarmería, que es una institución dependiente de este Ministerio, sino que además han hecho una serie de peticiones, de las cuales nos hemos hecho cargo en lo que corresponde, porque han hecho peticiones que están fuera de nuestra competencia. Pero de aquello que, si está dentro de nuestra competencia, si lo hemos hecho. No hemos tomado conocimiento de peticiones que nos haya formulado esta persona, que ciertamente también nos preocupa porque pensamos que su salud hay que cuidarla también, aunque no es responsabilidad del Estado, en este caso, hacerlo.