Temuco, 29 de mayo de 2024. El Lof de Temulemu, con la colaboración de la Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH), y de la Universidad de la Frontera (UFRO) organizó un seminario en conmemoración del décimo aniversario del fallo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (Corte IDH) condenando al Estado Chileno en favor del pueblo Mapuche y, en particular, los Lonkos y dirigentes indígenas que fueron perseguidos judicialmente por Chile por la defensa de sus derechos. Este fallo marcó un hito para Chile en la lucha por el reconocimiento y respeto de los derechos del pueblo Mapuche.
En el seminario participaron algunos de los Lonkos y dirigentes indígenas que fueron parte del proceso. Los ponentes insistieron en que el Estado, aunque ha cumplido con ciertas obligaciones impuestas por la sentencia, aún carece de un enfoque intercultural en sus políticas. La implementación de medidas educativas y de salud ha sido insuficiente, pues no ha trascendido al ámbito político y territorial, donde la persecución y criminalización del pueblo mapuche continúan.
Asimismo, los ponentes abordaron la continuidad de prácticas de criminalización y uso de la fuerza. La sentencia de la Corte IDH señaló claramente la violación del principio de legalidad y de la presunción de inocencia, además del uso indebido de la prisión preventiva. No obstante, en la actualidad se siguen presentando hechos cuestionados por la Corte, como el uso excesivo de la fuerza, la penalización injusta y los bajos estándares probatorios que criminalizan la lucha indígena, inclusive el hijo del Lonko, Rafael Pichún, está en la actualidad en prevención preventiva, lo cual es contrario al fallo de la Corte que recuera que se debe evitar al máximo la detención preventiva de miembros de pueblos indígenas.
Por otro lado, se denunció la falta de voluntad política para evitar el daño ambiental en los en los territorios Mapuches, ricos en recursos naturales que benefician al capital transnacional. Esta dinámica perpetúa los problemas y conflictos en la región. La reforma constitucional es urgente, ya que la Constitución vigente se enmarca en un modelo extractivista en el que los territorios indígenas no son respetados. La matriz económica que promueve esta constitución, que viene desde la dictadura militar, ha perdurado en los distintos gobiernos de transición.
Por su parte, la narrativa de los medios de comunicación sigue estigmatizando al pueblo Mapuche, etiquetado como criminal y terrorista. Las acciones de defensa de derechos y de la naturaleza del pueblo Mapuche no reciben la cobertura adecuada en los medios de comunicación, perpetuando un relato negativo y sesgado de su ejercicio de defensa.
Situación de la niñez
El Instituto Nacional de Derechos Humanos destacó la preocupante situación de la niñez mapuche. El trauma histórico y cultural debe ser abordado mediante un enfoque étnico adecuado que reconozca y repare el impacto sufrido.